La forma de medir el paro que tiene el Ministerio de Trabajo es desconcertante, pues no se contabilizan como parados los que solicitan empleo a domicilio, en una región distinta a la suya, o los que asisten a un curso, como los 1.500 trabajadores de Delphi en Puerto Real, a los que José Luis Rodríguez Zapatero y Chaves prometieron un nuevo empleo que sigue sin llegar. Estos tipos de desempleados no cuentan en la estadística oficial de 2.300.000 personas que buscan un puesto de trabajo.
Según el antiguo Inem, se acerca al millón el número de parados no considerados como tales. Es decir, en España sobrepasamos los tres millones de demandantes reales de empleo.
24.04.2008 - Rosendo A. Gutiérrez. Opinión LaVozDigital