martes, 2 de septiembre de 2008

Tres ingenieros gaditanos trabajan como asesores externos de Delphi en Polonia

Los técnicos, procedentes de la planta de Puerto Real, desarrollan labores de consultores técnicos independientes para una factoría polaca, entre otras Prestan sus servicios desde hace meses, aunque esta relación laboral no será duradera y concluirá tras cumplirse los objetivos que motivaron la contratación

Una empresa cierra un centro de producción para llevárselo a otro lugar en el que los costes son más reducidos, lo que permite aumentar el margen de beneficios; a esto lo llaman deslocalización. La misma compañía lleva a cabo uno de estos procesos y, a continuación, contrata los servicios de un empleado de uno de estos centros deslocalizados; a esto lo llaman fichaje. Tres antiguos ingenieros de la planta de Delphi en Puerto Real trabajan en la actualidad para la corporación multinacional. Antonio Martínez Andreu ocupaba un cargo de director de departamento en la factoría de componentes de automoción del polígono El Trocadero que cerró sus puertas en agosto de 2007, en la que trabajaba desde hacía 25 años. Antonio Cortés Gracia, ingeniero senior, también trabajaba para la fábrica gaditana desde 1982. Gustavo Adolfo Alonso González, por su parte, entró a formar parte de la plantilla en 1989 y, en el momento del cierre, tenía a su cargo el laboratorio de ensayos metalúrgicos de la planta.

Sin embargo, no han entrado en nómina de otros centros de producción de la compañía ni trabajan diariamente en uno de ellos, sino que lo hacen como autónomos ejerciendo labores de asesoría técnica en cuestiones para las que la multinacional ha solicitado sus servicios y que no tendrán una duración prolongada. Alonso viaja periódicamente a Polonia -en la jornada de ayer inició uno de estos viajes de trabajo- desde febrero. Cortés también realiza tareas de consultoría para la producción de una de las plantas que la corporación tiene en el país eslavo. Martínez, por su parte, no tiene relación con los centros de esta nación del este; este antiguo alto cargo de la fábrica puertorrealeña presta su orientación sobre productos que la multinacional manufactura en plantas que están aún más al este, en Asia.

La labor que realizan les obliga a desplazarse periódicamente al extranjero a los centros de producción, así como a mantener una relación laboral con la compañía aunque son también los clientes que adquieren los productos de Delphi los que requieren los servicios de estos tres ingenieros gaditanos. Estas circunstancias muestran bien a las claras el alto nivel de las capacidades de la antigua plantilla de la corporación en Puerto Real; dicho de otro modo, los empleados de la ya cerrada factoría eran uno de los principales valores con los que ésta contaba.

La plantilla

1.525 de ellos aún están pendientes de su recolocación y continúan formando parte del proceso que la Consejería de Empleo de la Junta de Andalucía puso en marcha en noviembre de 2007 con este objetivo. La formación específica que se impartirá para incorporarse a las futuras plantillas de varias empresas que forman parte de la reindustrialización de la Bahía comenzará próximamente, según informó la Administración autonómica y las empresas hace varias semanas. La previsión inicial es que a lo largo de septiembre den comienzo estos cursos para trabajar en la fabricante de palas eólicas Aeroblade y la compañía del sector aeronáutico SK 10, que forma parte del consorcio que constituirá Alestis, la futura Sacesa cuando se formalice la ampliación de capital que permitirá la entrada de Alcor y Ficosa en esta compañía andaluza. La fabricante de placas fotovoltaicas Gadir Solar, por su parte, los iniciará entre octubre y diciembre.

jlopez@lavozdigital.es