martes, 19 de mayo de 2009

Ayer comenzó a desmontarse la maquinaria vendida en la antigua factoría de Puerto Real y empezará a salir estos días

Ya queda menos para que finalice el proceso judicial que dicta aún el destino de los activos de la antigua fábrica de Delphi en Puerto Real. Según pudo saber ayer este periódico, sólo resta finalizar el proceso judicial que se sigue con los últimos acreedores de la multinacional que, aproximadamente, ronda la decena.

Aunque en alguno de ellos se antojaba difícil la consecución de un acuerdo, finalmente parece que se han solventado los problemas. De esta forma, en cuestión de varias semanas, se pondrá fin a la fase común del concurso de acreedores, que podría ser mediante convenio o bien mediante liquidación, que puede ser solicitada por ambas partes.

Como ya explicó en su día la titular del Juzgado, la jueza decana Nuria Orellana, la fase de liquidación llegaría en el momento que alguno de los acreedores lo solicitase, por no estar de acuerdo, llegado el caso, con la cantidad que se le asigne para saldar la deuda que mantenga.

En esto tiene mucho que ver el proceso de subasta llevado a cabo en días pasados en Puerto Real con la maquinaria de la antigua factoría. Tras cuatro días, dos presenciales (en el hotel Gran Ciudad del Sur) y on-line, se ha conseguido vender alrededor del 80% de toda la maquinaria de la antigua multinacional norteamericana en Puerto Real.

Ayer ya comenzó el proceso de desmontaje de la maquinaria que, en días sucesivos, comenzará a salir de la fábrica. Por el momento, las dos empresas seleccionadas para el desmontaje y reparto hasta sus respectivos destinos son la compañía sevillana MP y la ubicada en San Fernando, TSK. La primera tiene asignado el reparto del material procedente de las plantas 41 y U1, mientras que la segunda hará lo propio con las máquinas de la planta 40.

En principio, según el programa previsto, desde ayer y hasta el próximo día 22 se recogerían algo más de 600 lotes de maquinaria, aunque ayer aún no se había producido ningún porte. El resto de maquinaria se transportará a partir del próximo 25 de mayo.

Como ya se explicó en su día en la sala de subastas, los compradores de los lotes, casi 2.000, en los que se dividió el interior de Delphi, deberán realizar un pago aparte del precio de las máquinas: el del desmontaje y colocación en camión. Después, deberán abonar el transporte hasta el lugar de destino

Todo el dinero que se haya recaudado con esta subasta quedará a disposición de la administración concursal. Como aseguró la empresa encargada de las pujas, Troostwijk, en el plazo aproximado de un mes podrán disponer del montante total para hacer frente al pago de deudas a los acreedores existentes.

Este paso, junto al punto final en el que se encuentra el proceso judicial, hace que esté próximo a su fin el bloqueo en el que hasta ahora se encuentran los activos de Delphi.

Cuando esto sea una realidad, quedará en manos de la Junta de Andalucía la posibilidad de que alguna de las empresas anunciadas para llegar a la Bahía de Cádiz pueda reutilizar naves o superficie para comenzar una nueva actividad industrial aunque, por el momento, ninguna de ellas ha anunciado que dicha posibilidad exista.

Diariodecadiz