sábado, 24 de mayo de 2008

La Junta pretende colocar a 2.200 trabajadores en el sector naval para 2011

Cuando gira la rueda de la fortuna quien estaba abajo sube hasta lo más alto desplazando a quien disfrutaba de la privilegiada posición. Algo parecido ha sucedido con el sector naval y otros como el de la construcción. Si se mira cinco años hacia atrás, la situación de los astilleros públicos Izar era crítica; había acumulado pérdidas por valor de más de 500 millones de euros y estaba en quiebra técnica. Desde lo alto de la rueda, mientras tanto, contemplaban esta coyuntura los trabajadores de la construcción. Un lustro y un giro más tarde, la situación se ha invertido.

Las cosas van bien para Navantia -actual denominación de la antigua Izar-, en 2007 registró una cuenta de resultados con 200.000 euros de beneficios, algo que no había sucedido en décadas. El futuro es halagüeño para esta industria y la Junta de Andalucía quiere aprovecharlo para dar salida al creciente desempleo que genera la crisis en otros ámbitos laborales en la provincia. Para ello ha elaborado un plan formativo para el sector naval y que se ha preparado a la medida de las necesidades de Navantia, con la que se ha consensuado. Los cursos ‘responden a la situación de enorme optimismo que existe en la actualidad’ respecto al futuro de la constructora naval, explicó ayer el viceconsejero de Empleo, Agustín Barberá. La Administración autonómica invertirá en la realización de estos cursos 8,49 millones de euros. Los beneficiarios serán 3.845 trabajadores, de los que 2.175 serán desempleados; los 1.670 alumnos restantes serán empleados en activo de Navantia y de las empresas auxiliares que orbitan a su alrededor para reciclar sus conocimientos en las distintas materias. En la actualidad existe una prohibición por parte de la Unión Europea de aumento de la plantilla de Navantia. Esta restricción es de aplicación hasta el año 2014. No obstante, Barberá señaló que el estricto cumplimiento por parte de la empresa pública de los compromisos adquiridos con la UE y la existencia de carga de trabajo suficiente para aumentarla abre la puerta para que la Administración europea se replantee esta imposición. El viceconsejero matizó que no está en manos de la Junta este cambio y que ésta es la visión de los sindicatos al respecto. En cualquier caso, los alumnos que completen con éxito estos cursos sí podrán encontrar un puesto en las empresas auxiliares con las que trabaja Navantia. El plan formativo incorporará al mercado laboral 2.200 trabajadores cualificados para la industria naval a lo largo de cuatro años. Cabe preguntarse cuál es la demanda real de mano de obra en el sector. Barberá precisó que desconocen los datos de las necesidades reales de la industria auxiliar del sector y que será la próxima semana cuando dispongan de estos datos tras reunirse con representantes de estas firmas en un encuentro que mantendrán para exponerles esta planificación. El inicio de la docencia estaba previsto para septiembre, aunque el viceconsejero indicó que varios de los cursos se adelantarán a junio y julio. El plan se divide en dos fases bianuales. La primera se corresponde con el periodo 2008-09. Se realizarán 70 acciones formativas -24.550 horas lectivas- para 1.050 desempleados, con un presupuesto de 3,12 millones de euros. En lo que se refiere a los ocupados que actualizarán sus conocimientos, los 820 beneficiarios recibirán 108 cursos -7.344 horas lectivas-, para los que se destinarán 855.850 euros. Si se toma el conjunto de horas de docencia que se impartirán y la inversión que se realizará, se obtiene que cada hora de clase costará 128 euros; la hora de formación media que reciben los trabajadores afectados por el colectivo de Delphi, en cambio, le cuesta a la Administración 278 euros. El delegado provincial de Empleo, Juan Bouza, informó de que se ha trabajado arduamente con los responsables de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales -SEPI, órgano al que está adscrita Navantia- en el diseño de este plan formativo. Expuso que no son las primeras acciones formativas de este tipo y recordó que en los últimos cuatro años se han invertido 12 millones de euros en cursos que han recibido 1.800 alumnos en el Centro de Tecnologías Industriales de San Fernando. Si éstos fueron para mejorar la empleabilidad de la población, el nuevo plan nace para satisfacer la necesidad de empleo existente, explicó Bouza. El director general técnico de la Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo, Fernando Villén, apuntó el esfuerzo que tendrá que hacer la industria auxiliar naval en un momento como el actual en el que se tiende a la externalización de la producción. Barberá describió la situación que atraviesa el sector naval en la actualidad en la Bahía como paralelo al del aeronáutico en el que una compañía señera sirve de motor para el desarrollo industrial y económico de toda la periferia de donde se cardina.

Terra Actualidad - VMT

La UE da el visto bueno a Industria para ampliar las ayudas a la Bahía

La Cámara de Comercio pone la primera piedra de su centro de creación y consolidación de empresas en Puerto Real

24.05.08 - ÁLEX MEDINA R.

Segunda primera piedra del proceso de reindustrialización tras el cierre de Delphi. Mientras que sindicatos y clase económica en general andan preocupados por la instalación de las compañías que se prometieron después del adiós de la multinacional americana, la Cámara de Comercio inició ayer simbólicamente las obras de su nuevo centro de creación, desarrollo y consolidación de empresas en Puerto Real. Es el segundo edificio derivado del proceso de reindustrialización del que se pone su primera piedra, después de que Gadir Biodiésel lo hiciera en enero. En este caso, la Cámara gaditana ha contado con la ayuda concedida por el Ministerio de Industria dentro del paquete de subvenciones aprobado en octubre de 2007 para regenerar el tejido empresarial de la Bahía. El director general de Desarrollo Industrial del Gobierno central, Jesús Candil, vino a Cádiz una vez más y confirmó que las ayudas de Madrid seguirán llegando. Tal y como adelantó este periódico, habrá subvenciones a proyectos regeneradores del sector secundario e innovadores hasta 2013, «una vez que ya hemos recibido el visto bueno de la Unión Europea», matizó ayer.

Más innovación

La prórroga del programa de Industria es consecuencia «del éxito de la primera convocatoria de 100 millones», explicó Candil. Una de las realidades de ese proyecto es el CeCrea (acrónimo del centro que comenzó a elevarse ayer mismo). Con un presupuesto de 1,2 millones de euros y un plazo de ejecución de nueve meses, el edificio (cuya misión será similar a la de un vivero de empresas) dispondrá de siete despachos y ocho locales, así como de unidades de orientación que presten su apoyo a las empresas que se instalen. El dinero lo pone el Ministerio y el suelo lo cede el Ayuntamiento. «Nuestro objetivo es que se generen empresas de alto valor productivo, con base tecnológica y que ayuden a reactivar la economía de la zona», confió Ángel Juan Pascual, presidente de la Cámara de Comercio, en el acto previo a la cimentación de la primera piedra.

Falta le hace a la empresa gaditana un impulso al espíritu emprendedor. Según datos de la propia Cámara, Cádiz aporta el 12,7% del poder empresarial de Andalucía, a un nivel muy similar al de Granada y Córdoba (con bastante menos población), «y muy por detrás» de Sevilla y Málaga, que tiran de la economía regional. Esta situación descolgada se debe a que la gaditana es la provincia con peor densidad empresarial de Andalucía, con apenas 53 negocios por cada 1.000 habitantes (frente a las 61,33 de media andaluza y las 71,5 de España). Por si fuera poco, las pymes andaluzas tienen «escasa formación empresarial y muy baja incorporación de innovación y tecnología».

La Cámara de Comercio crea espacio para nuevas empresas

Levantará en Puerto Real nuevas infraestructuras, de la mano del Ministerio de Industria, para instalar ocho negocios nuevos. Estará listo a comienzos de 2009

F. Rufo / Cádiz | Actualizado 24.05.2008 - 05:01

La Cámara de Comercio, junto al Ministerio de Industria y el Ayuntamiento de Puerto Real, dieron ayer un nuevo impulso a la creación de empresas y pusieron de manifiesto que es posible conseguir superficie de estas características gracias a un buen entendimiento entre administraciones.

En una parcela del polígono IV-A de Puerto Real (cedida recientemente por el Consistorio a la Cámara de Comercio), se levantará el futuro Centro de Creación, Desarrollo y Consolidación de Empresas. Al acto asistieron el presidente de la Cámara de Comercio, Angel Juan Pascual; el director general de Desarrollo Industrial del citado Ministerio, Jesús Candil; y el primer teniente de alcalde delegado de Urbanismo del Ayuntamiento puertorrealeño, Antonio Noria.

El presidente de la Cámara de Comercio explicó a este periódico que se trata de una “excelente noticia” para la Bahía de Cádiz, “muy necesitada de nuevas empresas, y más aún Puerto Real con todo lo que ha pasado en Delphi”. En ese sentido, Ángel Juan Pascual señaló que esta nueva infraestructura “no es la solución al cierre de esa empresa, pero es una pequeña dosis de lo que se puede hacer entre todos”. Según sus cálculos, el nuevo Centro podría estar inaugurado a comienzos del próximo año.

En la misma línea, el director general de Desarrollo Industrial, Jesús Candil, también mostró su satisfacción por esta nueva sede de futuras empresas, “porque poco a poco se va materializando el programa que pusimos en marcha para la Bahía de Cádiz”.

El nuevo centro de la Cámara de Comercio en Puerto Real pretende ser “una plataforma para la creación, consolidación y desarrollo de empresas, así como para la dinamización y regeneración del tejido productivo de su entorno. Un espacio construido para trabajar de forma directa con las empresas, facilitando instrumentos que canalicen e impulsen las iniciativas empresariales para la Bahía de Cádiz”.

El edificio que albergará el proyecto cuenta con 713,45 metros cuadrados de superficie construida. Contará con siete despachos y ocho locales para el alojamiento de empresas, además del espacio de las unidades de apoyo, asesoramiento y formación.

Para tal fin, se incluye la figura de la Unidad de Gestión de Proyectos de Desarrollo (UPD), que trabajará en la planificación estratégica individual de las empresas de la zona, que sufren los efectos de la crisis industrial. Igualmente, desde esta UPD, se plantearán proyectos de dinamización de ámbito sectorial y planes de desarrollo de sectores emergentes. “Desde aquí se facilitará el acceso a las ayudas existentes en este ámbito, con especial incidencia en la reindustrialización”.