Tras los pasos de la aeronáutica
Recién salidas de la reconversión de Izar, las subcontratas encaran la suya propia: Navantia ya no quiere talleres, busca socios medianos con ingeniería y producción
La industria es el sector de la innovación por antonomasia. Evoluciona, cambia, se adapta, y exige de su entorno una transformación cómplice. Es un proceso común, pero la globalización exige ahora reformas profundas, estructurales. Es el camino que emprendió la aeronáutica y que ahora también se le demanda al sector naval. “Se tienen que preparar y ellos lo saben”, anuncia con rotundidad el delegado de Empleo, Juan Bouza.
Sus palabras, dirigidas a la industria auxiliar, resumen el espíritu de unas jornadas celebradas ayer en Cádiz que tuvieron como oyentes a 63 alumnos y cinco profesores de la primera promoción del plan de formación diseñado por la Junta, a través de la Faffe, y en colaboración con Navantia, ante incremento de demanda de profesionales. Ayer entraron 1.963 de subcontratas y en los próximos meses se alcanzarán los 3.500 ó 4.000.
Y lo que se puso de manifiesto en el seminario, ofrecido por ingenieros a título particular pero pertenecientes a la compañía naval, es que han pasado los tiempos del taller y la carne -en referencia a las entradas de mano de obra a destajo-. Navantia quiere ahora una industria auxiliar “capaz de asumir paquetes de trabajo, y de pasar de la mera asignación de recursos humanos a convertirse en empresas de tamaño medio, con producción propia, ingeniería y capacidad financiera”, según Bouza, que confió en las posibilidades del tejido gaditano para afrontar esta reestructuración. “Este plan de formación es un primer paso para tomar conciencia de que va a ser así”, concluía Bouza. La oferta planeada hasta 2011 es de 360 cursos. Ya han empezado nueve, siete de ellos en San Fernando y los otros dos en Benalup y Alcalá. Ahora sólo cabe esperar que respondan los colectivos objetivo -jóvenes, desempleados y trabajadores en FPO-, porque, según apuntó Vicente Martínez, gerente de proyecto de Navantia, la oferta formativa andaluza de grado medio y superior “es suficiente”, pero los matriculados “son muy pocos en relación con la oferta disponible y con la demanda existente”.
La consecuencia es que “la falta de titulados y profesionales de ingeniería se ha convertido en el mayor problema del sector en Andalucía”, según el director de la Unidad de Producción de Navantia Puerto Real-San Fernando, Francisco Domínguez. Con él coincidió José Luis Viguera, jefe de proyecto de Navantia, que apuntó a los EREs como la causa de que “la industria se haya descapitalizado en la ingeniería y los cuadros medios, que es lo que ahora tiene que suplir la industria auxiliar”. Y lo tiene que hacer, a su juicio, en prácticamente todos los departamentos, desde recursos humanos a planificación o calidad, porque la ausencia de personal es generalizada.
Domínguez remarcó también que la “capacidad del astillero puertorrealeño es impresionante y puede tener más trabajo”. Por ello, instó a la industria auxiliar a emprender una rápida modernización en diseño, producción y gestión, así como a obtener una mayor certificación, ya que sólo un 6% lo está en prevención de riesgos y un 34% en gestión medioambiental.
